D. José Raga ofrece una visión puramente economicista y pragmática, "el cliente tiene mucho que perder". Ciertamente eso lo saben pero no lo confiesan los abolicionistas, partidarios de la misma medida pero bajo una justificación muy diferente: fíjense en que en ningún momento se habla de "prostituidor" ni de "violencia de género" como se hace desde la "izquierda". El razonamiento de Pepe no se fundamenta en un "análisis de género", sino en un sencillo análisis de la realidad social: los clientes temen, en su inmensa mayoría, ser señalados como tales y por consiguiente son especialmente vulnerables a las sanciones. Eso lo entendieron muy bien en los EEUU, la persecución a los "johns" (clientes) penalizándolos socialmente mostrando sus fotografías en los tablones de anuncios locales, periódicos y hasta vallas publicitarias. Incluso existe un página llamada JOHNTV creada con el objetivo manifiesto de mostrarles públicamente, en estos videos se les puede ver siendo perseguidos por un maniaco anti-prostitución desde que contactan con la chica hasta que son arrestados por la policía.
Se suele asegurar que el cliente "se va de rositas", que el estigma social recae únicamente sobre la prostituta. Pues bien, vemos que no es así. "Irse de putas" es algo muy mal visto socialmente, el cliente "tiene que perder un nombre, tiene que perder un prestigio social". Es así, cuando "la gente se entera dónde va el notario" se le crucifica aunque sea el tío más majo, honrado y trabajador del Mundo. Es esto lo que quiero modificar, el hecho de ser cliente de prostitutas no te hace ser peor persona.
Cuando Federico afirma que "el que quiera y la que quiera, que se venda", no está defendiendo la prostitución: está defendiendo LA LIBERTAD, éste es el "PROBLEMA DE FONDO" como él mismo lo denomina. Suelo decir que yo no sólo apoyo la prostitución en tanto como cliente, sino principal y fundamentalmente como LIBERAL y como DEMÓCRATA. Del mismo modo que Montesquieu apostaba por la libertad de expresión por sí misma, aunque no estuviese de acuerdo con lo que se decía (¡precisamente ahí está la gracia!); Federico está respaldando la libertad y autodeterminación personal, aun confesando no ser cliente de la prostitución. Esto es algo que los abolicionistas no entienden (ni entenderán nunca), que apoyamos la prostitución por nuestros PRINCIPIOS Y VALORES LIBERALES, no porque tengamos algún "negociete" o seamos unos "puteros". Y además, en caso de darse alguna de estas condiciones (como es mi caso), en vez de considerarla como un hándicap como hacen ellos lo vemos como una circunstancia ventajosa pues permite un conocimiento mayor de la realidad.
Como tantas otras veces sale a la luz el "problema de salud pública" que aducen los reglamentaristas (no confundir con nosotros, los regulacionistas) para legislar sobre la prostitución. Estoy totalmente en desacuerdo con esto, no hay personas más interesadas en cuidar su salud que las trabajadoras del sexo, y de hecho los estudios que he ido consultando sobre el tema muestran que la incidencia de enfermedades es similar a la de la población general. Mi experiencia personal también desmonta este tópico por completo: es más, todos los casos de contagio de ETS que conozco han sido dentro de relaciones de pareja "estable".
Pero los liberales no sólo creemos en la libertad, sino que además pensamos que ésta se halla indisolublemente unida a la RESPONSABILIDAD. Así que comprendo y acepto cuando dicen que en caso de enfermedad lo pagamos todos y éste es un coste que debería recaer sobre los usuarios de prostitución o las prostitutas. Por supuesto asumo los costes derivados de mi comportamiento.
Don Federico señala que Público, "uno de los periódicos más obscenos", emprendió una fanática lucha contra la prostitución. Del mismo modo que ellos han erradicado los anuncios de prostitución de sus páginas yo he eliminado a la prensa carca-progre de mi vida.
El asunto de la trata es complejo y debería desarrollarlo en un post aparte pero no me resisto a comentar, aunque sólo sea superficialmente, lo que aquí dicen. Bien, la trata de seres humanos (TSH desde ahora) conlleva una obligatoriedad o coacción (en forma de rapto, engaño, violencia, etc), no así el tráfico. Es cierto que debido a la restrictiva Ley de Extranjería muchas personas han tenido que acudir a "redes" que las han facilitado la entrada al país, pero esto es de manera voluntaria. Según la Guardia Civil "se ofrecen ellas mismas a las organizaciones, sabiendo desde el primer momento que van a trabajar como prostitutas" (informe de los agentes J.L. González Álvarez y A.M. Muñoz Rodríguez). Dicho de otro modo, su "amiga" es la organización que les permite saltarse una ley injusta, su "enemigo" es el Estado que les prohíbe acceder a una vida mejor.
La Ley de Extranjería ofrece grandes privilegios para quien denuncia ser víctima de la TSH, tales como la suspensión de decretos de expulsión y la concesión de permisos de trabajo y residencia (lo cual podría incluso animar a presentar falsas denuncias, como han señalado los empresarios de ANELA). Pero a pesar de los esfuerzos de la Guardia Civil, los casos documentados de TSH según sus propios datos apenas rondan el 1% del total de personas que ejercen la prostitución (entre el 0,86% y el 1,12%, según el año). ¡Bonita cifra! Toda esa leyenda negra que pesa sobre la prostitución acerca de las mafias que engañan, que pegan palizas, que secuestran, etc supone UN residual caso de cada CIEN. Los agentes señalan en su informe que les "parece sorprendente" que siempre estas mujeres afirmen que ejercen la prostitución "voluntariamente", así que las dan el trato de "víctimas" porque entienden que viven en estado de necesidad y se hallan bajo el control de personas y organizaciones que se dedican a actividades delictivas, aunque "técnicamente" no se las podría denominar de esta forma. Muy bien, pues leyendo esto uno sólo puede pensar que tenemos unos policías o bien muy sectarios, que retuercen la realidad a su gusto cuando no se adecua con sus esquemas; o bien que son unos completos inútiles porque no detectan esas actividades delictivas en el 99% de los casos. ¿Con qué nos quedamos?
Como es bien sabido las mujeres no llegan de 50 en 50 o de 100 en 100, los macroprostíbulos funcionan como cualquier otra gran empresa: su "fama" hace que las chicas quieran trabajar allí, pues aunque hay mucha competencia, también hay muchos clientes. Yo he tenido amigas que se han ido a trabajar a ellos, y siempre es porque otra chica las ha dicho que prueben suerte allí. Las mafias que realmente existen en España no se dedican tanto a la TSH sino a la extorsión pura y dura, como en el caso de Castelldefels (cobrar un pago para no denunciar la existencia de personas en situación irregular) o de Coslada (funcionarios públicos que exigen el pago de una cuota para permitir trabajar a las chicas). Una regularización bien elaborada e implementada podría ayudar en gran medida a combatir estas mafias, ése siempre ha sido uno de los argumentos de peso de quienes la apoyamos.
Veréis que los abolicionistas no permiten la distinción entre prostitución libre y forzada porque, de hacerlo, se les caerían todos sus argumentos. Unas personas sensatas -como las que se sientan en esa mesa todas las mañanas- saben que hay que "desgranar el trigo de la paja", que hay que diferenciar. Eso es lo que proponemos los regulacionistas, legalizar la prostitución voluntaria y perseguir la forzosa, la esclavitud sexual. Realmente nos hace mucho daño que se generalicen casos que indudablemente existen de abusos y otras situaciones insoportables, porque no muestran lo que es la prostitución sino una mala caricatura de ella.
Finalmente Federico se posiciona claramente a favor de una regularización, porque históricamente "siempre ha existido prostitución y casi siempre ha estado regulada", y "siempre ha estado controlada de una u otra manera". Éste es el quid de la cuestión: si los poderes públicos no actúan van a ser otros quienes lo hagan. Las mafias existen, estoy convencido, por la situación de alegalidad en la que se encuentra la prostitución. La Guardia Civil reconoce que "el vacío legal y administrativo que rodea en nuestro país a los intercambios económicos cliente-prostituta dificulta la investigación policial de este fenómeno". En el caso de que disfrutasen de derechos como cualquier otro trabajador y pudiesen sindicarse y tener voz propia no creo que las mafias pudiesen tratar a las chicas como lo están haciendo.
Para solucionar este problema hay que partir de una solución realista, reconociendo que "moralmente es un asunto muy complicado, y al mismo tiempo no puede seguir así". Habría que comenzar por atraerse a la opinión pública mostrando la verdadera cara de la prostitución, ya que los abolicionistas han intoxicado mucho con sus mentiras. Como apunta Federico también habría que buscar un consenso, si el PP o el PSOE se oponen va a ser muy difícil hacer nada. Por eso creo que Rajoy dijo que las cosas estaban bien como estaban, que se siguiese regulando por vía de ordenanza municipal... porque llegar a un acuerdo en este tema va a ser casi una misión imposible, y desde luego requerirá un esfuerzo que nuestros políticos no están dispuestos a realizar.
21 comentarios:
Tu lo que eres es un pedazo de guarro y encima te dedicas a teorizar sobre tu propia mierda. Personalmente a los tipos como tú le cortaría los huevos, claro que yo no soy liberal ni falta que hace. Ojalá tengas el Sida, trozo de basura
De asturiano:
No debería cegarte la buena oratoria de Federico Jiménez Losantos. Su discurso sobre qué hacer con la prostitución en esta tertulia a mí me parece una cosa mixta entre el reglamentarismo (higienista) decimonónico y algunos elementos del abolicionismo: acepta la premisa falsa de que hay "auténticos rebaños" de mujeres en situación de 'esclavitud sexual', como razón que justifica la necesidad de una regulación. La idea de la "prostitución como 'mal menor' es la idea que subyace a sus palabras. Me parece que llega a decir que la prostitución en medio abierto no es aceptable por razones de tipo higiénico. Repasa su intervención y te darás cuenta de lo que en realidad supone un discurso 'liberal' como el suyo.
Me alegra que tanto Marta (que respondió en otra entrada a este mensaje) como tú discrepéis porque hacéis patentes mis carencias a la hora de trasladar el mensaje liberal al público general.
Don Federico es brillante, y (según yo lo veo) sabe que necesita CONVENCER de la bondad de una regulación a personas que serían reacias a un discurso plenamente pro-derechos como el de Hetaira. En política por lo general necesitas recurrir a subterfugios, emplear caminos secundarios en vez de tomar la vía más directa. Cuando me veas en TV te chocará mi discurso, porque probablemente también recurra a argumentos higienistas ¿significa esto que comparta sus posiciones? No, sino que yo tengo un objetivo muy claro que es defender la prostitución y para ello en la GUERRA POLÍTICA acudiré a justificaciones de todo tipo para preservarla, del mismo modo que hacen los abolicionistas para erradicarla. Mira, aquí se van a formar dos frentes muy claros, quienes queremos prostitución POR MUY DIFERENTES MOTIVOS (desde los empresarios a las feministas pro derechos) y quienes pretenden acabarla, llámense prohibicionistas o abolicionistas. A los vecinos que quieren largar a las putas sólo les importa conseguirlo, no cómo. Por eso dan la bienvenida a medidas tan dispares como la represión policial, el acoso a las chicas o la estigmatización del cliente.
Es posible que te sorprendas al leer esto, más de mí que siempre me he preciado ser una persona de principios. Sí, de principios, pero no gilipollas. Y en política por muchos principios que tengas si eres un gilipollas estás perdido. Tienes que saber que te vas a encarar con auténticos CACHOCABRONES que no van a tener los mismos miramientos que tú (lee un poquito más arriba a quarashi, por ejemplo). Así que aunque tengo que juntarme en esta lucha pro regularización con gente con la cual no comparto los mismos planteamientos, sé que es una necesidad imperiosa porque nuestros rivales lo están haciendo. En la vida real hay que tomar muchas soluciones pragmáticas, que idealmente no son las que desearías, pero aun así resultan preferibles a sus posibles alternativas. La política (y la prostitución es un problema político) se basa en compromisos, en alianzas, en llegar a puntos de acuerdo. Si pretendo llevar a cabo un "programa de máximos" inmediatamente voy a quedarme solo, por fenomenal que a mí me parezca. Recuerda que abordo la prostitución desde mi experiencia que no sólo es la de un cliente, sino también la de un politólogo en ciernes (aunque llevo muchos más años en el mundillo de la política que en el de la prostitución).
(sigue)
Siempre digo que hay que partir de lo que nos une, que ya encontraremos muchas cosas que nos separen. Tú sabes que milito en el Partido Popular, ¿pero crees que estoy de acuerdo con TODO lo que se hace o dice dentro del mismo? Ni de coña, un liberal como yo no tiene nada que ver con democratacristianos, conservadores o simplemente "trepas" que hay también en esta formación; sin embargo me hago cargo de que esta es la única alternativa que tenemos -de momento- al PSOE. La vida significa elegir, muchas veces no la mejor opción sino la menos mala. Ya sé que esto es una mierda, pero de momento es como están las cosas.
Y ahora pasemos de la estrategia de don Federico a su discurso. He remarcado que hace hincapié en que el problema DE FONDO es la libertad, a lo que añade que en unas determinadas condiciones. ¿No es lo que queremos los pro derechos, que los trabajadores del sexo se encuentren en mejores condiciones? Yo voy más allá, para mí el reconocimiento de derechos laborales va de la mano de los sociales, con la eliminación del estigma. Esta es la postura de un liberal auténtico, que a todos se les reconozcan los mismos derechos y que nadie sea discriminado por absurdos prejuicios.
La trata y las mafias empañan la prostitución, por lo que yo también soy partidario de combatirlas. Por desgracia los medios han magnificado ambos fenómenos (aunque en lo referente a las mafias nacionales se han quedado cortos) y es normal que una persona que no es usuaria de la prostitución tenga un conocimiento deformado de esta realidad. A esa gente es a la que quiero llegar, personas que pueden cambiar, que desconocen la prostitución. En cambio, como has podido comprobar, a los abolicionistas es tan inútil pretender cambiarles como soplar contra el viento.
Entiendo que pretende regular en primer lugar para respetar la VOLUNTAD INDIVIDUAL de las personas como claramente expresa, y en segundo para asegurar unas CONDICIONES DE EJERCICIO DIGNAS (desde la salud a la ausencia de mafias criminales). Nada se le puede reprochar. Hasta cuando cuenta la anécdota de Jacinto Benavente tiene unas palabras bonitas para ellas, diciendo que son "buenas personas".
Esta es mi interpretación del video, por supuesto cada uno lo veremos de una manera distinta. Espero que al menos quede claro qué digo y por qué lo digo.
Cliente X, el liberal libertino
Personalmente me costó un poco esta perspectiva política,desde la cuál aborda la prostitucioón ClienteX (vs la mía que es más de decribir una realidad de manera más objetiva posible), y eso me llevaba a discrepar un poco con él. Pero está claro que cuando se hace desde esta perspectiva (política) hay que ir a saco y sin miramientos, de hecho ya se dice la política es amoral (El príncipe de Maquiavelo, es el libro de cabecera de muchos políticos) por más que nos disguste, este punto no podemos obviarlo, no sirve de nada ser asertivo o en un lenguaje más cotidiano "ser guays o politicamente correcto".
No puedo escribir mucho. Pero discrepo totalmente. Cuando uno justifica los medios y los usa estratégicamente para conseguir un fin, y más en política, aunque sea crítico con esos medios (un discurso, determinadas medidas "provisionales"), el fin inicial se suele acabar diluyendo. Sobre todo teniendo en cuenta que muchas de las personas del PP que se han manifestado públicamente sobre el tema,incluso en los artículos que ha colgado Cliente X, manejan una serie de tópicos conservadores que son los que sustentan la puesta en marcha de políticas reglamentaristas, y francamente, no me parece que lo hagan de modo estratégico y coyuntural porque estén muy preocupados por las políticas migratorias de Fortaleza Europa, por el empoderamiento de las mujeres, por la feminización de la pobreza o por el estigma de la prostituta. Y el reglamentarismo siempre ha sido un desastre para las mujeres que ejercen. Además de que ignora la crítica que el feminismo pro-derechos le ha realizado, igual que al prohibicionismo y al abolicionismo.
Creo que Cliente x defiende una posición determinada desde un partido poítico (en el que también hay abolicionistas, igual que en IU hay regulacionistas -que no reglamentaristas-), y obviamente puede hacerlo (aunque francamente, dudo que a Federico, a la San Sebastián o a Nebrera les preocupen las mismas cuestiones), pero si esa relación la presenta como una postura necesaria, desde luego muchos y muchas pro-derechos van a quedar automáticamente excluídos de una posible lucha en común (yo diría que la mayoría). Es otra posibilidad vaya, pero es excluyente y también implica una elección.
Un saludo
De asturiano:
Me parece que en relación a este problema acierta más Marta con lo que dice que lo que defiendes tú.
A estas alturas me parece que tu posición política con respecto a qué hacer con la prostitución es más afín a la del feminismo pro-derechos que a las posturas pro-regularización que manifiestan algunos políticos del PP o personajes públicos afines a dicho partido. Creo que las consideraciones críticas de Marta en relación a la conexión entre los fines y los medios son muy acertadas. Deberíamos tenerlas en cuenta y suscribirlas. Mirad sino, en que ha consistido y los efectos que ha tenido la regularización llevada a cabo en Holanda.
uYYY qué lío!!
La verdad es que no termino de entender muy bien a que os referís.
Lo que si tengo claro son los efectos perversos de muchas decisiones.
Lo que también tengo muy claro es que lo más importante es conseguir la desconstrucción del estigma. ¿el cómo? buff, son muchos cómos aunque a mi modo de ver hay uno principal que pasa porque la prostitución sea reconocido como trabajo ( con unas características concretas, pero trabajo al fin y al cabo) y esto sólo depende de una decision que se toma en Las Cortes, y estas decisiones se toman en base a ideologías mayoritarias. Nu sé, nu sé
¿Sabes por qué me gusta la política, Marta? Porque es el juego de estrategia más apasionante que existe. Con esto no quiero que me atribuyáis un comportamiento maquiavélico, yo no estoy dispuesto a adoptar ciertos medios (como la mentira) para alcanzar mis fines ya que considero que un fin justo no puede nacer de unos medios injustos (y esto es algo comprobado históricamente).
Lo que os quiero decir en resumidas cuentas es que, tanto en política como en la vida, uno necesita aliados. Sé como nosotros vemos el tema de la prostitución, pero lo que hemos de lograr como muy acertadamente señala Marien es que la opinión que mantenemos sea aceptada MAYORITARIAMENTE. Si queremos tanto aliados como aceptación social hemos de ser flexibles, estar abiertos a la negociación y ser capaces de transigir con una solución que no sea plenamente satisfactoria pero que mejore la situación actual. Recordad que soy un pepero: soy un reformista, no un revolucionario. Despacito y buena letra. Vísteme despacio que tengo prisa. Las cosas de palacio van despacio…
Quiero que repaséis las entradas que he publicado sobre liberalismo y prostitución y me digáis qué es en concreto lo que os da esa mala espina. Porque yo leo a doña Isabel y no veo por ninguna parte reglamentarismo decimonónico. Es más, critica los “viejos prejuicios” en torno a la prostitución y a las “feministas de carné” que no son sino “ociosas de alta cuna”. Vamos, que incluso lo considero un artículo ANTISISTEMA. La señora Nebrera adopta nuestro mismo argumento de empoderar a las mujeres y dejarlas expresar sus inquietudes, son ellas las que “quieren ser tratadas como (los trabajadores de) cualquier otro oficio”, aparte de realizar una clara división entre la moral personal y la ley general. Puede que no esté completamente de acuerdo con nosotros (no lo sé, la verdad) pero yo no quiero convencerla. Yo lo que quiero es una sociedad en la que se viva y se deje vivir, y eso es posible con los liberales pero no con los social(fasc)istas. ¡Por Dios, si tenemos un MINISTRO DEL INTERIOR que ha dicho claramente que si fuese por él PROHIBIRÍA la prostitución!
De Federico ya he hablado largo y tendido, resumiré mis planteamientos diciendo que en él veo respeto a la libertad individual aunque desconozca la realidad de la prostitución (no puede saber de todo, no es Dios… pero casi, casi). Os pido que al menos les deis el beneficio de la duda, del mismo modo que hay muchos prejuicios contra la prostitución también existen sobre el liberalismo, el PP, y la demonizada “derecha” (conste que para mí es infinitamente más de derechas el PSOE que el PP). Mi pregunta final a todos vosotros es, ¿si tuvieseis que ejercer la prostitución a quién os gustaría tener de vecino, a un abolicionista (Pilar Rahola, Lidia Falcón, Rocío Nieto…) o a un regulacionista (San Sebastián, Aguirre, Jiménez Losantos…)?
Hola Cliente x:
Empiezo respondiendo por el final. Preferiría no tener como vecinos/as a ninguno de esos nombres que citas :-), si acaso a Labordeta (antiguo y admirado profesor de literatura de Losantos...qué cosas tiene la vida), por sus entrañables intervenciones en el Congreso: ésas de ¡a la mierda! y ¡el puño lo levanto yo, gilipollas!. Respecto a la demonización del PP, o de sus simpatizantes y militantes, pues sí, las cosas tienden a caricaturizarse a partir de estereotipos probablemente reduccionistas y desacertados, pero pasa lo mismo en sentido contrario. Porque a los del PSOE se les ha llegado a llamar por parte del otro bando rojos y stalinistas...y mira, stalinistas no, pero rojos...¡ojalá! En lo que sí coincidimos es en considerar que el PSOE no es un partido de izquierdas, aunque de todas formas, nunca se definió como un partido marxista ni nada parecido, sino más bien como un partido pretendidamente socialdemócrata que cada vez pierde más cafeína. En fin, que recuerdo aquella intervención de Anguita en la que pronosticó que con PSOE y PP iba a pasar como con Cánovas y Sagasta en la época del turno pacífico, y mira, ni Nostradamus...Así que, socialdemócrata...¡ojalá!
Después, argumentar que la imagen que tenemos del PP se basa en la demonización perversa del enemigo, sin tener en cuenta que muchos sufrimos los nueve años de gobierno del señor Aznar, es olvidar que no se trata de un partido que no haya gobernado nunca. De hecho, tú mismo has dicho que en sus filas además de liberales (y habría que ver qué liberalismo se defiende, que no hay uno sólo) hay militantes (y votantes) de otros muchos sectores sociopolíticos, y entre ellos, algunos muy conservadores (las peras y las manzanas...brillante la señora Botella, su disertación fruteril quedará para la posteridad, y sin necesidad de ser positivamente discriminada...) e incluso afines al nacionalcatolicismo más rancio. Yo puedo estar de acuerdo, y lo estoy, con la promoción y protección de las libertades civiles o con la necesidad de que el Estado no interfiera en las relaciones personales de los ciudadanos legislando sobre cuestiones morales , pero sí creo que lo debe hacer en lo que se refiere a la producción, gestión y distribución de los recursos, en eso no tengo nada de liberal. Lo que pasa es que normalmente las cosas se hacen al revés: se interviene donde no se tiene que intervenir (o donde se tiene que intervenir menos, o de otro modo), y a eso se le llama progresismo, y donde se tiene que intervenir no se interviene.
Hay mucha gente que no es afín ideológicamente al PP dentro del movimiento pro-derechos (incluso es posible que la mayoría), que es un movimiento civil desvinculado de partidos. Tú has colgado los textos de algunas señoras liberales, que de hecho forman parte de tu partido y me parece muy bien. Pero han circulado por ahí a lo largo de estos últimos años otros artículos o escritos en esa misma dirección de gente más bien afín a la izquierda. Algunos los leí en el blog de Marien y otros en la misma página de Hetaira, que además organizó un concurso de relatos cortos o algo así donde varios escritores que no eran precisamente del PP intervinieron. Del mismo modo, algunos dirigentes (Rajoy: hay que prohibir la prostitución en las calles) o concejales del PP (Fernández Díaz: el azote de las putas pro-restaurador de la Ley de Vagos y Maleantes), han alentado la persecución de un determinado tipo de prostitución. Y sus argumentos, cuando no son abolicionistas (Gallardón, la de la macedonia), son cercanos al reglamentarismo conservador (y machista en esencia) -lo cual es bastante normal porque los sectores conservadores y la jerarquía católica tradicionalmente han defendido esta postura-:
hay que controlar, higienizar, invisibilizar, disciplinar, convertir la prostitución en un problema de orden y salud públicos, tolerarla porque o es necesaria o inevitable, pero nada de dignificar, reconocer ni otorgar derechos a las profesionales o trabajadoras del sector. Luego no me parece que haya un vínculo tan claramente visible entre PP y pro-derechos. Es cierto que no iba por ahí el artículo, en concreto, de Montse Nebrera, pero el “mal menor” de su título y esa obsesión de algunos por el “control sanitario del colectivo” me chirría, aunque tienes razón en que no hay motivo para convencerla de nada, y desde luego prefiero su escrito a cualquier raholada, válgame Dios. La mención que hace San Sebastián al aborto como conquista femenina sí que me parece perversa. Es que no sé a qué viene mezclar churras con merinas, y me hace sospechar que quizás al margen de su liberalismo (que a lo del aborto no lo debe aplicar, como doña Espe) pocos puntos debe tener en común con las feministas que hicieron la tarea de tratar de deconstruir el estigma de puta.
Y luego, sí claro, puede que haya que jugar estratégicamente y obtener una apuesta de mínimos, vale. ¿Pero qué mínimos? Bien, imaginemos cuál podría ser la propuesta legislativa que viniera del movimiento pro-derechos (de las trabajadoras sexuales mismas y de sus representantes, que al fin y al cabo son las que tienen que hacer esa tarea): habría que afrontar la cuestión de las inmigrantes y de su regularización (por distintos cauces, según modalidades), porque si no pasaría como en Holanda. Y a mí la política inmigratoria del PP...como que me choca: relacionan el florecimiento de las mafias con la falta de control de las fronteras -cuando estamos intentando convencer de lo contrario-, hacen propuestas lepenistas como lo del “contrato de integración” , se llevan las manos a la cabeza con lo que llaman “regularizaciones masivas”, hablan de falta de recursos por culpa de la “masificación” poblacional que el Estado no puede absorber, etc. Después, muchas teóricas pro-derechos explican que numerosas trabajadoras sexuales inmigrantes se inician en el trabajo sexual porque sus alternativas laborales son igualmente precarias, en el sentido de su escasa o a veces inexistente regulación. El trabajo sexual les proporciona más dinero invirtiendo menos tiempo y eso compensa el peso del estigma y la desvalorización social que tienen que sufrir. Habrá que plantear que aquí hay un problema de fondo sobre el que también se necesita barajar propuestas, justamente para favorecer que quienes lo quieran dejar dispongan de alternativas razonables, y no sé yo si los de la “flexibilización laboral” estarán muy por la labor. Además, un determinado posicionamiento liberal sin más es ideal para eludir la cuestión. Por tanto, los argumentos de Jiménez Losantos, además de por las razones esgrimidas por Asturiano en relación a su discurso que yo comparto y tú atribuyes a su desconocimiento del tema, me parecen bastante débiles y distantes de los objetivos pro-derechos.
(Ya acaba)
Es verdad, hay dos partidos mayoritarios y las leyes se aprueban en el Parlamento. Pero cualquier reforma no conlleva necesariamente una mejora de las condiciones de vida y trabajo de las mujeres, ni tampoco el establecimiento de las bases para una futura evolución hacia un cambio más profundo. Muchas veces las reformas implican estancarse y no avanzar, e incluso involucionar. Por ejemplo, usar el discurso del orden y la salud pública es peligroso, porque resulta que para ti puede ser un elemento transitorio y estratégico, pero para mucha gente que vota o que ejerce en la política profesional es el punto de llegada. Así que la pedagogía en cuanto a la normalización de la prostitución-y su normalización real-, al respeto a la trabajadora sexual, al origen del estigma de la prostituta que hay que triturar, a los usos machistas de algunos clientes , etc se iría al carajo. Y para eso, algunas trabajadoras sexuales activistas han dicho que incluso se contentarían con la descriminalización y la aplicación del Código Penal en cuanto a las mafias o a las formas de violencia que puedan padecer, sin regulación alguna (Pia Covre, por ejemplo, e incluso Marga Carreras refiriéndose a la regulación de la Tura para Cataluña). Vamos, que no veo yo el camino tan evidente ni tan fácil...
Saludos
Realmente agradezco el interés que muestras, Marta. Siempre que escribo un post lo hago pensando en qué reacciones levantará y valoro más las críticas que suscita que las alabanzas. Bien, creo que ambos consideramos trascendental el tema de las alianzas: es evidente que por nosotros solos no podemos hacer mucho, nuestras demandas han de ser recogidas por un partido que las organice y las incorpore a su agenda política. Ahora bien, ¿con quién nos acostamos?
En primer lugar hemos de ser conscientes de que quienes defendemos una propuesta pro-derechos (no digamos ya la normalización social) somos grupos MUY MINORITARIOS, que la mayor parte de la sociedad no está interesada en este tema, que a todo lo que podemos aspirar en un futuro inmediato es a que al menos podamos ser ACEPTADOS y no criminalizados, rechazados y patologizados como ha venido siendo hasta ahora. No es que yo sea un pesimista ni mucho menos un conformista, es que tenemos que partir de lo que hay. En estos momentos lo que hay es una REPULSA GENERALIZADA hacia la prostitución, especialmente la callejera.
Políticamente hablando nos encontramos en una situación de inferioridad frente a los abolicionistas. Ellos están bien considerados socialmente, cuentan con apoyos políticos al más alto nivel (Rahola, Valenciano, Muñoz Santamaría, Botella, Trías...) y nosotros estamos HUÉRFANOS de tales apoyos. Mira que lo he dicho muchas veces, que en política la clave no está en la razón sino en la FUERZA. Tenemos la tremenda SUERTE de que exista un importante sector dentro de la "derecha" que comparte al menos nuestras reivindicaciones más inmediatas. Cometeríamos -a mi juicio- un error estratégico al despreciar este apoyo por nuestros propios prejuicios ideológicos.
Veo así el panorama en estos momentos: los abolicionistas han conseguido que sus tesis triunfen plenamente en el PSOE, partido que para mí no es que no sea de izquierdas, es que ha PROSTITUIDO al socialismo y en estos momentos se encuentra en la extrema derecha del abanico político. Por eso suele referirme a ellos como social-fascistas: son rojos por fuera y absolutamente azules por dentro. Sí, fueron nominalmente marxistas hasta su XXVIII Congreso, después de pasarse 40 años de vacaciones conviviendo con el franquismo. Pero qué curioso, ahora que ya no hace falta hay que ver cuánto antifranquista hay... me pone enfermo tanto oportunista, tanto progre de boquilla hijo y nieto de falangista, tanta y tanta hipocresía... ¿Rojos, dices? Pero si el PSOE es el partido HEREDERO de la Falange. Hace no mucho tiempo consideraba que el PSOE y el PP eran dos caras de la misma moneda, que pretendían reeditar el "turno pacífico" de la Restauración (tengo un par de artículos publicados en la FIM, fundación de investigaciones marxistas, sobre el tema... ¿te sorprende? Que yo, al igual que las chicas, tengo un pasado...) pero ahora mi enfoque difiere sustancialmente. Estamos asistiendo a una feroz lucha entre DEMÓCRATAS y TOTALITARIOS, y si bien es verdad que ninguna formación política representa en su totalidad a uno de estos bandos, para mí está clarísimo que el PSOE pretende hacernos volver a la época más oscura del franquismo. Con otro nombre pero con todas sus características: sindicatos verticales controlados por el gobierno, criminalización y persecución de la oposición política, propaganda descarada del régimen, corrupción generalizada, control de la educación y de los medios de comunicación... Fíjate lo que te digo, para mí el partido socialdemócrata en la actualidad es el PP.
La postura del PP no sólo sobre la prostitución, sino sobre muy diversos temas, es totalmente heterogénea. Dediqué en su día una entrada a este asunto, busca en el archivo del blog el último post de Julio. Es innegable que dentro del PP hay algunos carcas de toda la vida, como la señora Botella… ¡pero el PSOE está plagado de NEO-CARCUNDIA! No estoy diciendo que de repente vaya a ser todo maravilloso con el PP, pero sí que tendremos más posibilidades de atraer a nuestro campo a los liberales que a los sociocarcas. Tampoco sostengo que para apoyarnos en el PP tengamos que comulgar con todo lo que dice, ni yo que actualmente milito en él lo hago. Estamos hablando en concreto de la postura que mantienen en cuanto a la prostitución, aunque económicamente yo también prefiero que no intervenga el Estado a que lo haga para robar a los pobres y darle a los ricos como ha hecho el PSOE. No soy un forofo ni del laissez faire ni del intervencionismo, sino que considero que ambas doctrinas tienen su sentido en determinadas circunstancias.
El MONUMENTAL ERROR que en mi opinión está cometiendo el movimiento pro-derechos es desvincularse de otras luchas al no entender que forma parte de la serie de enemigos que el socialfascismo ha de combatir para implantar su modelo totalitario de sociedad. Me habrás leído un montón de veces las razones por las que apoyo a este movimiento. No es por ser cliente, sino por ser demócrata. Los fascistas progres pretenden liquidar todo tipo de libertades: la educativa, la cultural, la de expresión y por supuesto la sexual. Vamos a ver si espabilamos y empezamos a darnos cuenta de con qué tipo de enemigo lidiamos.
Tengo varios artículos más de liberales, la serie no ha acabado aquí. La diferencia como ya he comentado es que la postura pro-derechos está triunfando en los círculos liberales y DE DERECHA (por mucho que escueza), mientras que la abolicionista es la hegemónica en los totalitarios y DE IZQUIERDA. ¿Qué hay gente de izquierdas de verdad que apoya esta lucha? Pues claro, cabe especialmente destacar a Inés Sabanés que escribió para Hetaira, pero son posturas absolutamente MARGINALES y MARGINADAS en la izquierda. Tengo pendiente escribir un post para explicar mi interpretación de las posiciones de Rajoy y de Fernández Díaz, adelantándote un poco las cosas diré que Mariano no ha hecho más que pronunciarse creyendo representar la voluntad general (está muy “arriolado”) y que Alberto no resulta representativo del PP, pero que en su lugar yo incluso habría hecho lo mismo. Sí, sí. Porque no es lo mismo hablar desde el gobierno que desde la oposición, y si tu rival está equivocado es tu deber darle el empujón de gracia para que caiga al abismo. Frente a un Tripartito de nazionalistas yo no tendría el menor escrúpulo, como dijo Vidal-Quadras “a los nazi-onalistas ni agua”. Y añado yo, “y si tienen sed, polvorones”.
Al igual que Sabanés, Aguirre habla de derechos y de reconocimiento social. Los liberales no realizamos una valoración moral de la prostitución, o si la hacemos dejamos claro que es nuestra postura personal y no tratamos de imponerla como has podido observar que es el caso de D. Federico.
En definitiva, no vengo a decir que caigamos rendidos en los brazos del PP sino que visto lo visto tendríamos no sólo que no desechar esta posibilidad sino valorarla seriamente. La prostitución no es un tema prioritario para los partidos mayoritarios en estos momentos, y además van a evitar pronunciarse con respecto a ella puesto que saben que es un tema muy sensible, que levanta ampollas, y en el que tienen mucho que perder y poco que ganar. Pero nosotros podemos cambiar esto, y la única vía por la que veo que podamos hacerlo es acercándonos a los liberales del PP. Puede que me esté equivocando, por supuesto (en estos momentos votan lo mismo que el PSOE), no he hecho más que opinar sobre la dirección que tendría que tomar este movimiento. Yo también tengo mis puntos innegociables (como el mantenimiento de la prostitución de calle) y prefiero marchar solo que mal acompañado. Mas en algunos casos hay que transigir. Marien y yo hemos estudiado la propuesta de una celebridad que, aunque despierta en nosotros ciertos recelos, puede ayudarnos a impulsar nuestro discurso mucho más de lo que jamás hubiésemos soñado. Hemos acabado aceptándola, los beneficios son mayores que los posibles inconvenientes. En otros casos las alianzas pueden resultar contraproducentes. Por ejemplo no acudí a la manifestación de este sábado porque aunque soy contrario a la actual reforma de la ley del aborto no me opongo al aborto en sí, y los convocantes (el foro de la familia) pretendían instrumentalizar la convocatoria con este propósito.
Nuevamente gracias por tu interés, me alegra sobremanera que se cuestionen mis palabras.
Cliente X, dando la vuelta al Mundo
Vamos a ver, no tengo tiempo, pero resumo. En primer lugar, creo que está claro que cuando he relacionado PSOE con rojerío y socialdemocracia era irónicamente, de ahí el ¡ojalá! (supongo que ya lo sabes pero por tu respuesta no me queda muy claro), y cuando he dicho que no se había definido como un partido marxista, hablaba de la vida política
activa del partido a partir del 82, cuando empezó a gobernar después de la Transición, no del período anterior. También creo que deberíamos dejar las genealogías de unos u otros durante la Guerra Civil o la posguerra, porque si nos remontamos a los orígenes del PP y a sus figuras estrellas...malament. Hay algunos que deberían haber ido a parar con sus huesos a la cárcel y desgraciadamente no lo hicieron. Y otros que aún hoy se muestran ambiguos con el temita, así que mejor dejamos el guerracivilismo que diría aquel.
Ahora bien, no lo decribiría (al PSOE) como un partido totalitario, así en general, en términos estrictos: por muy poca simpatía que me genere creo que el totalitarismo es otra cosa, y el fascismo también. Ya sé que está de moda que unos se llamen fascistas a otros a la primera de cambio: aquí pasa con las manifestaciones de Ciutadans o con cualquiera que no sea nacionalista y no me gusta que se desvirtuen los términos. Al final los convierten en etiquetas que no significan nada.
Lo que me parece que no se puede hacer es considerar que cualquier persona que se sitúe ideológicamente a la izquierda, sea crítica con el PSOE (partido al que no he votado en mi vida, aunque he de reconocer que después de la última legislatura aznariana estuve tentada, pero resistí) y haya salido escaldada de la deriva de Izquierda Unida, deba pasarse al PP. No simpatizo con tu partido, no soy liberal (al menos no en todos los sentidos) y no es una cuestión de prejuicios, sino de juicios e ideología. Si quieres iniciamos una discusión al respecto, pero no sé si viene a cuento. Concédenos a los demás la posibilidad de haber leído los programas políticos del PP, y de no haber llegado a la misma conclusión ni querer adoptar la misma posición que tú. Creo que probablemente en esta misma situación haya muchas personas, y dentro del movimiento pro-derechos también. Dudo que se vayan a convertir en militantes o simpatizantes en masa del PP sólo por el tema de la prostitución (cuando un partido gobierna se ponen en juego muchas cosas). Incluso en lo que respecta a ese tema, no veo la situación tan clara: no sé si los sectores liberales más afines a posibles políticas pro-derechos tienen tanto peso en el partido. Pero hay bastantes figuras públicas y políticamente activas que cuanto menos cuestionan esa asociación (ahora además hay una menos, que la Nebrera se ha ido del "pozo ponzoñoso" o no sé cómo lo llamó). Desconozco la propuesta que habéis estudiado Marien y tú y desconozco a qué te refieres con lo del "programa de mínimos", por llamarlo así, luego no puedo opinar sobre el asunto. A lo de la inmigración no me has respondido, digo yo que esta cuestión se contemplará en dicha propuesta...
Tampoco me sorprende en absoluto tu artículo sobre lo del turno pacífico, ya me comentaste tus orígenes :-).
Si según tú las palabras de Rajoy se deben a querer satisfacer los sondeos sobre la opinión pública, ya me dirás qué se puede esperar. Ésta es la peor de las justificaciones. Es que estoy en contra de la imbecilidad supina de gobernar para contentar a todo el mundo, es otra de las causas por las que me cae mal el PSOE... Y de lo de que el impresentable del Fernández Díaz utilizó la ordenanza barcelonesa para presionar y desgastar al tripartito nacionalista ,mira, no sé qué decirte . Ignoro si he transmitido la aversión profunda que siento por esa ordenanza y, sobre todo, por lo que representa, y no sé si la has leído y seguiste las discusiones que precedieron a su aprobación . El PP local ha pedido recientemente que se endurezca, especialmente en lo relativo a las putas (vamos, que de avisarlas nada, a multarlas directamente: aunque total, la práctica común ya era la de no avisarlas).
Así que asumiendo que como dices (aunque lo dudo) la conversión de problemas sociales en una cuestión de orden público (y no sólo de la prostitución, es una ordenanza amplia que no deja títere con cabeza: vagabundos, inmigrantes vendedores del top-manta, jóvenes sospechosamente agrupados, etc),con todo un discurso sin desperdicio en que apoyarse, y la cantidad de trabajadoras sexuales multadas, humilladas, detenidas y llevadas a centros de internamiento y en el peor de los casos con expedientes de expulsión abiertos era una mera estrategia política... ese señor me resultaría todavía más despreciable, si cabe. Igual tenemos ideas distintas de lo que es legítimo hacer en política.
Yo no pinto nada. No soy nadie representativo del movimiento pro-derechos: la mía no es más que una opinión anónima y sin peso. Quienes tienen que decidir son quienes están currándoselo día a día con las trabajadoras sexuales. Y ni siquiera me parece que no se puedan pactar propuestas si esas propuestas van encaminadas hacia lo que ellas desean. Ahora bien, otra cosa es que para establecer esos posibles pactos haya que integrarse en un partido: me resulta bastante difícil verlo por el perfil de personas que he conocido que forman parte activa del movimiento. Y créeme si te digo que la explicación no está en que hayan sucumbido a la manipulación perversa del PSOE que demoniza a los pobres militantes del PP (partido incorrupto, parece ser, con la que está cayendo...). Ya te he comentado que el PP gobernó dos legislaturas, y que la gente también tiene memoria, no se basa sólo en caricaturas del enemigo para definirse políticamente. Tampoco todos los de izquierdas rebotados de un partido han de seguir la trayectoria de Losantos(catolicismo-marxismo-liberalismo)
,algunos están intentando sacar a flote una alternativa, y siguen prefiriendo los márgenes. ¡Menos mal!
Agradezco tu extenso comentario.
Un saludo
Aunque ando muy liado no me importa en absoluto detenerme en este tema ya que veo que te interesa. Mira, creo que has entendido a qué me refiero cuando hablo del trasfondo que tiene este tema de la prostitución. He puesto varios ejemplos donde creo que queda en evidencia el totalitarismo que impera en el PSOE: van de feministas e igualitarios y luego son los más machistas, de defensores del trabajador y son los que más le putean, de adalides de la libertad de expresión y no han hecho más que restringirla… El totalitarismo existe, y se manifiesta por ejemplo en el caso que expones, cuando se pretende aniquilar políticamente a los demócratas (apartheid a los no nacionalistas). Los fascistas le llaman fascista al demócrata. ¿Delirante? No, lógico. Es gente sin principios, no les importa emplear una terminología u otra con el fin de prevalecer sobre el adversario político. Fíjate que es lo mismo que realizan las abolicionistas, siempre comienzan por controlar el lenguaje.
En ningún momento os he dicho que os afiliéis al PP, que le votéis ni nada parecido. Mi trayectoria es la mía y punto, cada uno sigue su evolución y su camino. Me parece genial que se siga apoyando desde la izquierda una postura pro-derechos, porque en su época yo estuve en esa izquierda “auténtica”, pero que hoy por hoy considero que se encuentra prácticamente extinguida. Eso sí, me gustaría que fueseis un poco más críticos y pensaseis a más largo plazo. Es complicado cambiar la postura política de un momento a otro, por el momento creo que lo mejor es que quedemos en que nuestros objetivos inmediatos son los mismos. Yo te considero a ti, a las de Hetaira, a los de IU pro-derechos, etc como ALIADOS. Tenemos que empezar por aquí, por nuestros puntos de unión. Como aliado me gustaría que me escuchaseis y consideraseis mis palabras, no que forzosamente las asumieseis. Eso es todo. Me parece más que razonable.
Si no te respondí a lo de la inmigración no fue adrede sino porque con tantos puntos se me pasó. Todo liberal es contrario a las fronteras, lógicamente me opongo a una ley de extranjería excluyente y criminalizadora. Esta postura la comparten muchos de mis compañeros, para quienes la inmigración es una fuente de riqueza y prosperidad, no de problemas. Sin embargo hay que reconocer que existen varios inconvenientes prácticos. El primero de ellos es que la inmigración ha puesto en tensión al Estado de Bienestar, de ahí el afán por controlarla. También tenemos la normativa europea que España ha de respetar, nos guste o no estamos atados por el derecho comunitario. Y por último que cuando se produce un fenómeno social tan relevante los poderes públicos han de prever medidas que puedan paliar sus consecuencias negativas (me estoy refiriendo básicamente a la integración), cosa que por lo general no se hace. Podrían haberse implementado programas de repoblación del territorio, planes de empleo para inmigrantes, regularizaciones progresivas (en vez de masivas que crean conflictos tanto en la sociedad como en la administración)... En cambio lo que vemos es que, como ante tantos otros problemas, se da la espalda a un asunto hasta que estalla, entonces se recurre a medidas oportunistas y populistas para salir del paso que acaban empeorando la situación a la larga (Rubalcaba ha emprendido una auténtica cacería del indocumentado, me subleva cuando veo a los de extranjería apalancados a la salida de un metro o de cualquier otro sitio pidiendo papeles a todo aquel que ven más moreno de la cuenta).
Sobre las palabras de Rajoy o Fernández no he hecho más que elucubrar, desde mi perspectiva, acerca de cuales podrían ser sus motivaciones últimas. Desconozco las reales. Si las quieres conocer ves y se las preguntas. Ni ellos son yo ni yo soy ellos, también tienes a otros líderes del PP (del Manzano o Aguirre) que mantienen opiniones opuestas. Te invito a leer la entrada titulada "El PP y la prostitución", creo que dejo bastante claro cómo enfoca el partido este tema de la prostitución (desde la diversidad más absoluta de posturas, simplemente no se han sentado a definir una postura concreta).
Para acabar voy a ver si aclaro el malentendido sobre mi postura política. Creía que no había dejado lugar a dudas pero al parecer no es así. He dicho PUNTO UNO, que nosotros no tenemos fuerza política como para conseguir que nuestras reivindicaciones tengan peso real, es algo que necesitamos DESESPERADAMENTE. Las abolicionistas sacan a diputadas del PSOE (o PSC) respaldando sus tesis, nosotros no tenemos a nadie ni del PSOE, ni del PP, ni de IU ni la madre que los parió que dé la cara por nosotros. Si Inés Sabanés se convirtiese en nuestro caballo de batalla yo no la rechazaría en absoluto. Pero donde PUNTO DOS veo más probable que nuestro mensaje encuentre eco es en el enemigo natural (al menos en teoría) del PSOE. El PP podría incluir en su agenda la regularización de la prostitución, seguramente no del modo que idealmente desearíamos pero sin duda mejorando la situación presente. Tal y como estamos ahora podemos hacer mucho ruido pero vamos a obtener pocos resultados prácticos. Sencillamente quiero rentabilizar mejor nuestros esfuerzos. Finalmente creo que PUNTO TRES entre el movimiento pro-derechos existe una reticencia enorme a acercarse a esta formación por lo que para muchos de vosotros representa, y eso lastra sobremanera nuestras posibilidades. Los abolicionistas no han tenido el menor reparo a la hora de apoyarse en los "progresistas" para defender unos planteamientos que a todos nosotros nos parecen "ultraconservadores". ¿No es cierto? Se me podrá objetar que esto va a parecer el Mundo al revés, ellos con "la izquierda" y nosotros con "la derecha"... pero es que ya hace tiempo que todo está muy torcido. ¿Socialistas al lado de los nacionalistas? ¿Botín respaldando a Zapatero? ¿Rajoy afirmando que es "más socialista" que Zapatero y dirigiéndose a los currantes? Se han vuelto las tornas, lo decía el año pasado Savater: hoy en día lo progresista pasa por conservador y lo sonservador por progresista. Yo sigo siendo el mismo joven, con idénticos principios ideales, que una vez estuvo en las juventudes del PCE. Sólo que me he encontrado con que eso mismo que creía defender desde la "izquierda" realmente desde donde puedo hacerlo es desde la "derecha".
Cliente X, siempre jodiendo
Huy, huy...mucho tema y, como me has comentado en privado, no vamos a alargarlo eternamente porque además implica demasiadas discusiones al margen de la regularización del trabajo sexual. Yo no sé tus compañeros, pero la política inmigratoria oficial del PP consta en sus programas políticos, e integró una parte importante del discurso electoral de Mariano y también ha protagonizado algunas polémicas recientes. O sea, que es accesible a cualquiera que se quiera hacer una idea.
Tampoco hace falta que le pregunte a Rajoy qué opina, pues ya dejó claro públicamente lo que opinaba respecto a la prostitución callejera, eres tú quien me ha sugerido que probablemente se trataba de una estrategia discursiva y no de su posición real, y a eso es a lo que te he respondido.
Sigo sin compartir el calificativo de "totalitario" para el PSOE como partido , y analizaría de otra manera lo que está pasando con ese limbo político que llaman centro (izquierda o derecha) y que conduce a que Savater afirme lo que afirma (no sin parte, sólo parte a mi entender, de razón). Pero la posición que adoptamos a partir de ahí es radicalmente distinta, y a mí izquierda y liberalismo pepero me parecen incompatibles.
Respecto al nacionalismo catalán (que yo no lo soy, pero es un mal localizable igualmente en el otro "bando": se necesitan mutuamente para existir y mutuamente se demonizan), ningún régimen totalitario impide que se forme un partido no nacionalista y gane representación en las urnas. De verdad que soy muy crítica con este tema (no sabes cuánto), y creo que en Cataluña existen situaciones surrealistas, pero de ahí a sugerir que hay una dictadura dista un trecho.
Por lo demás, entiendo que no proponías la necesidad de que el movimiento se integrara dentro de un partido,así que agradezco la claración porque me daba esa impresión, y a mí personalmente los pactos concretos, si tienen un contenido que cumple esos "mínimos" (que para otro pueden ser "máximos", porque hasta ahora no he oído a nadie sugerirlos concretando las cosas, ya se verá...), pues me parecerían bien si van orientados en la dirección en la que creo que coincidimos. La discusión también está en qué es mejorar la situación presente. Pienso que, por ejemplo, a nivel autonómico la cosa tendría más sentido con IU que con el PP, pues en Cataluña es el partido que más abiertamente se ha posicionado con las pro-derechos pidiendo la regularización y la creación de un barrio rojo. Aunque es cierto que un cambio en profundidad tiene que pasar por el centro.
Gracias otra vez. Y no te pongas esas firmas que jodernos no nos jodes :-). Si todos los del PP mantuvieran tu posición igual sería más fácil...pero a veces te leo demasiado inspirado por Federico al caracterizar al "enemigo" (nacionalismo, PSOE...), aunque es verdad que tú mismo has manifestado tu profunda admiración por él.En fin, no sé si hemos llegado a un mínimo consenso en el disenso, pero lo que sí creo es lo que tú mismo dijiste: "Vísteme despacio que tengo prisa". Pos eso, prudencia.
ESTIMADOS HERMANOS:
Solicito la necrofilia voyeurista de un pedofílico quien residen en lote 5 manzana "R" del sector 5 de los claveles de residenciales San José del municipio de San José Pinula del departamento de Guatemala de mi país Guatemala de la América Central porque soy el lider universal de las trabajadoras del sexo otorgado por un blog pertinente a las tales y porque tambien con mi liderazgo contraté a 4 trabajadoras del sexo para resarcirme parafílicamente en mi hogar contiguo al pedofílico. 4 blogs de las trabajadoras del sexo fueron los que contraté gratuitamente, los cuales son: PURAS NALGONAS, PURAS NALGONAS AMATEUR, LATINA SEXY GIRL Y BADOO AMIGAS. El desaparecido servicio a domicilio FOR GENTLEMEN de Guatemala me resarcieron especulativamente porque mis conspiradores me calumniaron de prevaricador en occidente central de Guatemala con mi secuela de calumniarme de violador sexual en oriente central de Guatemala por los tales.
Atentamente:
Jorge Vinicio Santos Gonzalez,
Documento de identificacion personal:
1999-01058-0101 Guatemala,
Cédula de Vecindad:
ORDEN: A-1, REGISTRO: 825,466,
Ciudadano de Guatemala de la América Central.
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