lunes, 20 de julio de 2009

Compañera fallece en Mallorca por la gripe A

Las noticias sobre este suceso todavía son contradictorias, en un primer momento se habló de una mayor agresividad del virus H1N1 pues la víctima, Mabel Innocent, al parecer se encontraba en buen estado de salud. Sin embargo posteriormente se señaló que podría padecer neumonía.


Esta muerte ha servido para que los diferentes medios de comunicación muestren algunas de las más penosas, pero reales, condiciones de existencia del colectivo probablemente más desfavorecido de las trabajadoras sexuales en España (exceptuando quizá a las asiáticas). La inmigrante acudió primero a un centro de salud y luego a un hospital con una tarjeta sanitaria que no era la suya, residía en un piso "patera" y ejercía la prostitución en la calle (presumiblemente en horario nocturno, como la mayoría de sus compatriotas). Desearía que, al ir siendo consciente la sociedad de las duras condiciones que soportan estas mujeres, surgiese un sentimiento de simpatía y solidaridad hacia ellas. Con frecuencia observo que son tratadas con desprecio, y aunque yo no me atienda con ellas siempre las recibo con una sonrisa y buenas palabras. Ser amable no cuesta dinero y suelen agradecerlo. Además me ayudan a practicar un poco el inglés, que lo tengo bastante descuidado desde el instituto...


Diminuta habitación en un supuesto piso patera de Barcelona. Por lo general las mujeres que ejercen la prostitución en medio abierto residen en hostales de la zona o pisos compartidos con buenas condiciones de habitabilidad y salubridad (según mis estándares, claro), no obstante algunos amigos "puteros" afirman que existen los pisos patera donde viven hacinadas. Es posible que esto sea cierto para los grupos más desamparados, como al que pertenecía Mabel.



Estas mujeres, "las negritas" como cariñosamente las llamamos los clientes, por lo general entran con todos (muchas otras tienen sus reglas, no hacen servicios a borrachos, a tíos maleducados o con mala pinta, o a sus compatriotas -especialmente las rumanas-) y tiran por el suelo los precios, estrategia empresarial muy cuestionable y además cortoplacista, ya que los clientes nos acostumbramos a las rebajas y a los "extras", y si nos lo hacen una vez lo volvemos a querer siempre (hablo tanto por mí como por lo que me cuentan las chicas). Es posible tener servicios por 20 y hasta por 15 euros. Por una noche entera, que con una chica de la calle vendrían a ser entre 300 y 500 euros (dependiendo de la chica, del trabajo que tenga, del día y de lo bien que la caigas), piden tan sólo 100 (algunas amigas me lo dejan a ese precio, pero es eso mismo: precio de amigo).

Todo esto lo cuento para ir concienciando a la gente, aunque es posible que algún "listillo" lo interprete como que puede follar por 15 euros. Toma, y por 10 con las yonkis, o que te la chupen en los polígonos. Las chicas que bajan el precio es porque se encuentran en condiciones muy precarias, y yo no me atiendo con ellas. Se lo he dicho claramente: no subo con ellas por FALTA DE COMPAÑERISMO, al hacerlo están jodiendo a las demás chicas. Además se pueden buscar movidas, más de una pelea he visto por este motivo, y las considero plenamente justificadas. Una cosa es que tengan buenos clientes, a los que ofrecen descuentos por entrar más tiempo, y otra muy distinta es que emprendan una captación agresiva bajando el precio mínimo.

No es mi intención emprenderla aquí con nadie, sino que he aprovechado para ampliar un poco la información acerca de las condiciones de existencia y laborales que soportan algunas de estas mujeres. Vuelvo a recalcar que es el extremo, que las rumanas o las latinas se hallan en condiciones infinitamente mejores. Existe un breve documental en el youtube, "vidas anónimas", en el que se acompaña a una trabajadora sexual ecuatoriana a lo largo de su jornada diaria, tanto en el trabajo como en casa. Si tenéis un rato podéis buscarlo, refleja fielmente las condiciones medias de existencia de las que ejercen en los polígonos.

En cuanto a Mabel qué decir, es una auténtica lástima dejar este Mundo tan pronto, a la edad de Cristo (33 años). Suele vincularse la prostitución con la existencia de enfermedades (tema importantísimo, que tengo que tratar) y podría cundir la alarma entre las chicas y sus clientes, lo cual afectaría muy negativamente al sector. Al parecer sus compañeras dieron negativo en la prueba, pero en cuanto a la salud toda precaución es poca, y sabiendo que provenía de Madrid habría que realizar análisis a aquellas chicas que trabajaban con ella. Lo más seguro es que estén más sanas que un roble, aunque ya sabemos que como dice el refrán "más vale prevenir que curar".

Ésta es la notica en el ABC:


Residía en un «piso patera» de Palma de Mallorca


JOSEP MARIA AGUILÓ, ABC PALMA DE MALLORCA

La mujer nigeriana de 33 años que falleció el pasado jueves en Palma de Mallorca, en el Hospital de Son Llàtzer, víctima de la nueva gripe, se dedicaba a la prostitución en la zona turística de Punta Ballena, en el municipio mallorquín de Calvià, según confirmaron fuentes policiales.
Había llegado de Madrid hacía varias semanas y residía en la capital balear, en la calle Tomàs Rullàn, ubicada en la barriada de Son Gotleu, una de las zonas más humildes de la ciudad y a la vez con mayor presencia de inmigrantes. La víctima vivía en una «piso patera» con otras familias extranjeras. El domicilio está habitado ahora por entre cinco y diez personas, según fuentes solventes.
Un mediador social municipal de origen nigeriano habló ayer, a título personal, con esas personas para aconsejarles que vayan a un centro de salud con el fin de hacerse unos análisis y comprobar si han sido infectados con la gripe A.


Con documentación legal

Cabe recordar que la víctima había acudido el pasado viernes al centro de salud Escuela Graduada, en Palma de Mallorca, al parecer con una tarjeta sanitaria que no era suya, aunque tenía documentación legal para residir en España. En el centro le diagnosticaron un proceso gripal, por lo que se le aconsejó que tomase paracetamol y que descansase en su domicilio. Dos días después, su estado se agravó, y acudió al Hospital de Son Llàtzer, donde ingresó con una neumonía bilateral. Al no responder al tratamiento, pasó a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) el pasado martes, y falleció a primera hora de la mañana del jueves.
Por otra parte, y aconsejadas por la Policía Local de Calvià, varias compañeras de la víctima acudieron el pasado jueves al Hospital de Son Dureta de Palma de Mallorca para hacerse unos análisis, siendo dadas de alta todas ellas, incluida una mujer que presentaba síntomas de un posible proceso gripal.
Por último, el consejero de Salud, el socialista Vicenç Thomàs, reiteró ayer el mensaje de tranquilidad expresado el pasado jueves, y afirmó que los servicios sanitarios de Baleares están totalmente preparados para abordar cualquier situación relacionada con la gripe A, así como para tomar las medidas de prevención necesarias para poder anticiparse a cualquier posible eventualidad.

4 comentarios:

Amazona, dijo...

Es cierto que algunas bajan mucho los precios.

También tenemos que comprender que muchas de las que bajan los precios no conseguirían clientes de otra forma. La competencia es muy fuerte. Y vosotros perdeis el culo por compañeras guapísimas, de aspecto adolescente y sano, y de raza blanca.

Es comprensible que lo hagan, independientemente de las consecuencias.

Por otro lado da miedo lo que pueda pasar con la nueva gripe cuando llegue el frío. Desde el ministerio de sanidad ya están avisando que habrá miles de muertes.

Da la sensación de que la nueva gripe se ensañará con nuestro colectivo. Un condón no protege contra el contagio de gripe.

Cliente X dijo...

Bien, están hablando de 8 mil muertes, que soltado así suena a una barbaridad, pero al parecer son las que produce anualmente la gripe común en nuestro país. Hemos visto que se ha extendido entre militares, en colegios o en campamentos juveniles, donde mucha gente está en contacto continuo durante un periodo prolongado de tiempo. Personalmente tengo la impresión de que puede ser más fácil contagiarse en el metro que echando un polvo, y de lo malo, malo, pues siempre se puede follar a lo perrito, que así no hay contagio por vía respiratoria :-) (y claro, ante la duda rechazar al cliente, la salud es lo primero)

Yo no tengo la impresión de que el factor precio sea tan determinante, y eso que yo ando más pelao que un pollo escaldao. La prostitución de calle se mueve en unas tarifas orientadas ya a gente de bajos recursos como trabajadores no cualificados, estudiantes o jubilados. Si no pudiésemos ni tan siquiera permitirnos esos precios, créeme que no iríamos. En la calle todo el margen con el que podéis jugar es de 5 euros (las yonkis son un caso aparte, pero no me follaba yo a una ni aunque me pagase ella), eso no es dinero, ni siquiera para mí. Y te está hablando un tipo que ha estado ganando menos de esos 5 € a la hora. Para la mayoría de nosotros eso es calderilla, y si la chica se los baja la pierden el respeto. Tú hazme caso que conozco a los clientes, a mí me dicen cosas que a vosotras no os confesarían. Luego se toman una copa en un club y ya les cuesta 10 €.

Muchos clientes que acuden a la calle también son usuarios de otras tipologías, a vosotras os pagan el mínimo, incluso son capaces de regatearos, y luego se van a un chalet y pagan 70, o 90 a una "independiente" que se anuncia por internet. Cuando a los hombres nos gusta un coño, y no estoy descubriendo aquí América, somos capaces de gastarnos lo que tenemos y lo que no tenemos.

La mejor manera de enganchar a un cliente, se sea o no agraciada, es mediante la atención. Ha habido chicas guapísimas con las que casi no he entrado, porque son muebles, o groseras, o antipáticas, o todo a la vez. A algunas las mata el carácter. Y otras que siendo feuchas pues me han tratado bien, han sido amables y cariñosas conmigo y he repetido frecuentemente. Si la chica además de guapa es maja entonces ya lo tiene todo, miel sobre ojuelas, se convierten en mis favoritas. Fíjate, con la niña que más subo siempre me quedo media hora (esto es, pago dos tiempos). Podría estar con dos, o pagar la mitad, pero la prefiero a ella. Si hacéis que los clientes os deseen, ellos irán tras vosotras a daros su dinero. Una de las cosas que más me emputan es ver cómo algunas de las chicas "placan" a los clientes como si estuviesen jugando al rugby: les cogen del brazo, les persiguen, y una chica nueva hasta les salta encima. Eso de agobiar al cliente no funciona, no en mi caso por lo menos. ¡Utilizad vuestros encantos! ¡Haceros desear! El cliente no debe pensar en el dinero, sino en estar con vosotras. Los clientes no regatean cuando compran entradas del cine ni cuando piden una caña, ¿por qué a vosotras sí? Tened confianza en vosotras, si le gustáis volverá.

Algunas no bajan ni un euro, es el caso de una amiga que regresó hace apenas unos días (no puedo decir por aquí su nombre, pero ella sabe que es la mejor mamá del Mundo). Recuerdo una anécdota curiosa. Estaba yo hablando con ella, como tantas otras noches (si no hay mucho trabajo las agrada mi compañía, charlando se pasa más rápido el tiempo) cuando se la acercan dos tipos. El primero la pregunta que cuanto, ella contesta que veintiséis, a lo que él la responde que lleva 23. Ella, con firmeza y elegancia, nuevamente dice 26. Su amigo comenta que le pueda dejar dos euros. Y ella, quemándolos con sus infinitos ojos verdes, vuelve a decir: VEINTISÉIS. Ellos se marcharon, pero yo -que ya me había atendido y no pensaba volver a entrar- la recompensé subiendo con ella, por 26 € por supuesto. Olé sus ovarios.

Recuerda este principio, Amazona: di que no y luego negocia.

Nadie va a defender vuestro pan por vosotras.

Amazona, dijo...

Todo esto que me cuentas lo he vivido en mis carnes muchas veces.

Intentando crear una complicidad entre ambos, suelen repetir. Y yo misma he comprobado como repiten conmigo por ese motivo.

La verdad es que si en la breve comunicación que se da con el cliente desde el coche cuando pregunta por tus servicios ellas intentaran ser un poco más comunicativas y complices, notarían la diferencia.

Pero Cliente porno, no es oro todo lo que reluce. En la calle, por muy buena profesional que seas, los clientes se te acercan desde el coche y la mayoría entran a saco con lo de "¿Cuanto cobras?" y apenas te dan oportunidad para demostrarles los maravillosa "amazona" que eres, cuando salen pitando dejándote con la palabra en la boca.

Suele ocurrir que de 8, 7 preguntan a toda prisa y no te cogen, y 1 que te pregunta un poco más relajado y puedes bromear con él sí te coge.

Teniendo en cuenta que la mayoría preguntan precio y pisan el acelerador con unas prisas que serían la envidia de Fernando Alonso, ponte en la situación de todas las que no están tan bien vistas y también te parecerán comprensibles sus bajas tarifas.

Estoy contigo en lo de las que acosan a posibles clientes. No consiguen nada, nos dan mala fama y los espantan.

Cliente X dijo...

Jejeje. Lo de Cliente X más bien tiene que ver con Eliot Spizer, el gobernador de Nueva York envuelto en un escándalo de prostitución. Él era el cliente 9 (IX) del "Emperor's Club". Así que jugando con el siguiente número, el 10 y la X que significa lo desconocido, lo oculto, me "bauticé" como Cliente X.

La verdad es que yo no he contratado nunca los servicios desde un coche, supongo que la negociación será más rápida en esa modalidad. No sé, me parece que hay poca interacción entre ambos. A mí me gusta mucho disfrutar de la chica antes o después del coito, por ejemplo antes de subir en la calle me voy muchas veces a tomar un café con mi favorita. Charlamos un rato antes de subir, sin prisas, especialmente me gusta este plan cuando hay fútbol ya que no vienen más clientes. O en los clubes, si voy pronto (como haré hoy), puedo quedarme un buen rato acompañando a la chica abajo, bromeando, dándola un masajito, consintiéndola...

Los clientes sabemos que los precios son estándares, así que a veces preguntamos el precio únicamente como manera de romper el hielo, si no conoces de nada a la chica, ¿qué la vas a decir?, ¿que como la ha ido el día? Algunas rumanas hasta te responden con el precio cuando las preguntas cómo se llaman: ¿cómo te llamas? "25 euros". Hmmm... un nombre muy bonito (lol).

¿Que es posible que algunos vayan a por lo más barato, a por una ganga? No te digo que no, pero a poca experiencia que tengan sabrán que es mejor echar un buen polvo por 25 que uno malo por 20 o 15. Cuando yo no regateo obtengo resultados mucho mejores, muchas veces las chicas me han regalado tiempo (por ejemplo me piden que pague sólo la habitación). En los clubes (ahora que me he ido de mi entorno no me queda más remedio) pago media hora y siempre llega a una, en una ocasión la chica me tuvo tres horas, dándole a la lengua (y no me refiero sólo a hablar, jajaja). En la calle esto es más difícil, pero también se puede, especialmente con las nuevas. En las habitaciones de Caballero de Gracia estuve, en una ocasión, una hora por apenas 25 €. Yo quedé flipado, la chica iba pagando los tiempos con el dinero que la había dado y en ningún momento me pidió más (luego sus compañeras se cabrearon un poquillo...)

Creo que tu trabajo se asemeja de cierta manera al de un comercial, que habla con muchos potenciales clientes pero sólo algunos "compran". Los precios son importantes, hay mucha competencia como dices, pero a fin de cuentas lo que importa es la calidad del "servicio" o producto que oferten y su labia a la hora de llevarse el gato al agua. Muchas veces lo que supuestamente iba a salir barato, acaba siendo más caro. No creo que muchos hombres renuncien a calzarse a la mujer que les gusta por otra que "se lo deja" por 5 € menos, a no ser que estén muy pasados de rosca y les dé igual con quién estar. Si les gustas ten por seguro que si hoy no tienen dinero regresarán cuando lo tengan, no van a dejarte escapar por 5 €.

Diferencia entre lo que hacemos y lo que decimos, con frecuencia nos inventamos excusas como "no tengo dinero", "es muy caro", "acabo de follar", "estoy esperando a una amiga", etc para decir simplemente que no queremos estar con una chica (da bastante palo decírselo a la cara).