lunes, 12 de junio de 2017

Contra el estigma de puta

"Son las abolicionistas, no los clientes, quienes me ven como un pedazo de carne. Los clientes siempre me han respetado"
Anna Alba, prostituta

"Los periodistas, los policías y las feministas emplean las palabras más estigmatizantes sobre mí y mi trabajo que mis clientes nunca usarían"
Svensk Hora, prostituta

"Las feministas me han tratado (y a aquellas como yo) con menos respeto que cualquier cliente"
Juliet Brando, prostituta

"Las abolicionistas se refieren a nosotras de una manera más deplorable que el peor de los clientes"
Maria Alba, prostituta

"No se tiene que mirar mal ni a las personas que quieran cobrar ni pagar por sexo consensuado"
Little Soleil, prostituta

"Estoy orgullosa de ser una trabajadora sexual, pero desafortunadamente el estigma abunda y muy pocas trabajadoras sexuales pueden resistirlo y todavía somos tratadas como ciudadanas de segunda. Para mí, la palabra puta es un término honorable que usamos entre nosotras".
Julie Bates, prostituta

"En el trabajo social lo más importante es no dejarse llevar por los prejuicios"
Estefanía Acién González, socióloga



La anterior entrada necesitaba un desarrollo posterior, y os lo traigo. Es el comunicado de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía del pasado 2 de Junio. Y es que a día de hoy desde las instituciones y autoridades públicas se sigue reforzando el estigma de puta. Por eso me alegro de declaraciones como la de la viceconsejera de Políticas Sociales del Gobierno Vasco, quien aseguró que "se deben superar prejuicios, y combatir la discriminación y los estereotipos negativos que padecen las personas que ejercen la prostitución". A ver si es verdad, me gustaría que se quedase en algo más que una bonita frase pero lo que tengo más que comprobado es que los políticos no tienen ni una mala palabra... ni tampoco un buen acto.



Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA)
2 de junio de 2017

Existe un estigma que actúa sobre todas las mujeres como un aviso, una amenaza que llega en forma de censura social en caso de que ocupes un espacio que no debes, a una hora inapropiada y con una postura indebida… Nos referimos al estigma “puta”. Desde tiempos inmemoriales, hasta nuestros días, actúa dentro de nosotras esa llamada al orden social que, con mayor o menor fuerza, aparece en forma de vergüenza.

Este estigma “puta” que actúa como violencia estructural y simbólica es la misma violencia que nos alcanza a todas las mujeres. ¿Pero qué pasa cuando esta violencia, censura, este estigma, sale del ámbito de lo subjetivo y lo simbólico para acomodarse en nuestro mundo material a través de leyes que penalizan estos comportamientos? Nos referimos a lo que significa el estigma puta para la puta, la trabajadora sexual. Y nos referimos concretamente a la base de las muchas vulneraciones que sufren como colectivo y como trabajadoras, nos referimos a también a la Ley Mordaza o ley de seguridad ciudadana, los planes anti prostitución y las ordenanzas, formas de criminalizar  que viene a instaurar una verdadera “caza a la puta”.

Carteles como éste refuerzan el estigma asociado a las prostitutas, donde se las representa como un reservorio de enfermedades. Este tipo de propaganda justifica posteriores medidas represivas tomadas en su contra.



La lucha de las trabajadoras sexuales contra el estigma lleva tiempo ocupando, a nivel individual y colectivo, su primera línea de trabajo. La estrategia no es siempre la misma: “Yo no soy puta, trabajo de puta” es una expresión que pone de manifiesto el anhelo de liberarse de la dura carga que supone el estigma. Atiende a la necesidad que muchas mujeres que ejercen el trabajo sexual tienen por separar su vida profesional de la familiar y la social. En otros casos, el lema “yo también soy puta” o “yo soy puta” está siendo reivindicado por muchas trabajadoras movilizadas en la reclamación de sus derechos, o por colectivos que trabajan junto a ellas.

Por ello, en este día  2 de Junio, Día Internacional de las Trabajadoras del Sexo, (aniversario de la protesta de 1975 en la que más de cien prostitutas francesas ocuparon la iglesia de Saint Nizier en Lyon) nos queremos sumar a la campaña que nuestras compañeras de Genera (Barcelona) han puesto en marcha, y decimos junto a ellas: #YoTambienSoyPuta

Para asociaciones como AMMAR (Mujeres Meretrices de la Argentina) el estigma se debe combatir mostrando que detrás de la puta hay una mujer normal, normalmente madre, que lo que hace es salir adelante en la vida y cuidar de su familia. Soy de la misma opinión.



Quienes estigmatizan a las prostitutas insultándolas, volcando la rabia y el desprecio que las profesan, lo que hacen es retratarse. Muchas prostitutas, como muestro en las frases que introducen esta entrada, han comprobado que quienes se dirigen a ellas de manera despectiva son esas "feministas" que pretenden la abolición de la prostitución. Que si vasijas, que si receptáculos de semen, que si agujeros... Por poner un ejemplo reciente, aquí un caballero escribió un artículo (muy aplaudido entre estos círculos feministas abolicionistas) en los que tilda a estas prostitutas que defienden sus derechos como "coños neoliberales". Podéis verificarlo, me parece fuerte hasta a mí, pero ahí está. Como ya no pueden seguir ignorando a las prostitutas ahora lo que hacen es atacarlas tratando de desprestigiarlas. Y hay también campañas publicitarias como ésta desarrollada en Canadá, donde se representa a las prostitutas como personas afectadas psicológicamente, abusadas en la infancia y, nuevamente, como un foco de infecciones:




¿Cómo responden las trabajadoras sexuales y sus aliados? A este caso en concreto, el Colectivo Stella lo hizo lanzando una campaña en la que oponía mujeres reales a las grotescas caricaturas dibujadas por los anti prostitución. También lo hacen como la activista Julie Bates, mostrando orgullo por no sentir vergüenza de identificarse a sí misma como una trabajadora sexual. Pero entre todas las iniciativas que conozco, la que más aplaudo es la de RedTraSex (Red de Mujeres Trabajadoras Sexuales de Latinoamérica y el Caribe) en la que a través de cortos vídeos de Youtube que rondan el medio minuto (en estos tiempos de inmediatez hay que resumir la información, lo que hago yo de leerme artículos e incluso informes completos es una verdadera extravagancia) desmontan los más corrientes tópicos y estereotipos referentes al trabajo sexual:




¡Un fuerte abrazo a todas estas valientes que combaten la desinformación, la ignorancia y el fanatismo con las palabras reales de trabajadores sexuales auténticas! A largo plazo la victoria será nuestra porque ellos necesitan mentir y nosotros simplemente mostrar las cosas como son. No tendremos los medios para desarrollar costosísimas campañas publicitarias como las suyas, pero la voz de la calle no tiene precio. ¡Adelante!

3 comentarios:

Hott dijo...

Un trabajo digno como cualquier otro y la gente está en contra y se usa como insulto a otras mujeres. De verdad... a ver si nos modernizamos!

Carla Mila. Escorts en Madrid dijo...

Menos mal que este día se sigue celebrando. Hasta ahora por lo menos en España, las escorts, trabajadoras del sexo en general, también pueden reclamar sus derechos. Que por supuesto los tienen!!!!
Saludos.
Carla Mila

Anónimo dijo...

Algún día este oficio será digno como cualquier trabajo!