Santiago Pardilla Fernández, estudiante de sociología y bloguero
"La prostitución es una de las manifestaciones más extremas de la violencia de género y de esclavitud (...) el Partido Comunista de España se declara contrario a cualquier forma de explotación y esclavitud de seres humanos y, por lo tanto, a la reglamentación de la prostitución como una manera de legitimar la violencia contra las mujeres (...) no se puede regular una actividad que convierte a las personas en objetos a la venta".
Cristina Simó, Secretaria de Mujer del PCE
"Considerar la prostitución como un trabajo más es una idea que sólo contribuye, desde nuestro punto de vista, a perpetuar una situación que menoscaba la dignidad del ser humano y, en especial, de las mujeres, y que únicamente beneficia a quienes se lucran con el comercio del sexo".
Antonio Jiménez, Secretario general de la UGT de Murcia
"Todos dicen que la prostituta es una esclava, pero lo que realmente pasa es que se aprovechan de nosotras porque una esclava no tiene derechos; mientras continuemos siendo prostitutas tenemos que ser salvadas, ¿no? Ellos nos quieren dar la libertad pero sólo fuera de la prostitución; así pues no nos escuchan, y en la práctica nos condenan a estar sin libertad, pero tienen que cambiar su discurso".
Grisélidis Réal, histórica prostituta y activista hablando sobre los abolicionistas
"Considerar la prostitución una actividad indigna y degradante, en línea con el pensamiento del feminismo puritano de reforma moral de finales del XIX, brinda una buena excusa para mantener las pésimas condiciones en las que las prostitutas ejercen su trabajo".
Manifiesto "Otras voces feministas"
Desde luego, no todo el mundo comparte la visión de la prostitución que transmiten las prostitutas y las personas que componen su entorno. Existe un muy nutrido grupo de (autodenominados) "expertos" -que provienen fundamentalmente del mundo académico (universidades), político (miembros de partidos y sindicatos) e institucional (jueves, fiscales y policías)- cuyas tesis y explicaciones resultan totalmente opuestas. Por normal general su discurso halla amplia repercusión en los medios, a diferencia de lo que sucede con el de las trabajadoras sexuales y sus aliados, así que probablemente no les sea desconocido.
Como muestra, he seleccionado esta entrevista a un sociólogo en ciernes, Santiago Pardilla Fernández, administrador del blog "sociologosplebeyos". La considero muy ilustrativa de lo que vienen a ser los planteamientos abolicionistas oficiales, por ejemplo la Unión General de Trabajadores califica la prostitución como "una forma de esclavitud, desigualdad y violencia hacia las mujeres" mientras que el Partido Comunista de España la define como "la forma de violencia de género y de esclavitud más antigua del mundo". Puede cambiar el orden de los factores, mas no el producto.
La manera de demonizar la prostitución consiste en equipararla con todo aquello que la gente repudie, como por ejemplo la esclavitud (pero también con las drogas, la delincuencia, las enfermedades... es el "rechazo por asociación"). Se busca convencer no con razones y argumentos sino con sentimentalismo y prejuicios, es decir, con demagogia. Como el conocimiento real y objetivo perjudicaría sus fines, los abolicionistas ponen gran empeño en propagar sus embustes mediante campañas de desinformación como la de la imagen (perteneciente a la exposición "The Journey"). Con ellas tratan de evitar que la ciudadanía tenga un contacto directo con la realidad, pues les perjudicaría, sustituyéndola por una ficción que avale sus tesis.
Como pueden apreciar, para este sector la prostitución es un mal bajo toda condición y circunstancia. Emplean una serie de términos (los llamados "adjetivos disuasivos") para emitir un contundente juicio sobre esta ocupación que imposibilite cualquier diálogo. Si la prostitución ES ESCLAVITUD, ES DENIGRACIÓN, ES VIOLENCIA y ES DESIGUALDAD; ¿quién va a defenderla? Únicamente alguien mal de la cabeza u horriblemente perverso (que es la imagen que pretenden dar de nosotros), pues evidentemente a nadie le gusta ni la esclavitud, ni la denigración, ni la violencia, ni la desigualdad. La consecuencia es doble, por una parte se impermeabilizan frente a cualquier razonamiento que provenga de los detestables explotadores (he estado con los comunistas y sé de lo que hablo, es la doctrina "no les escuches que igual te convencen", más popularmente conocida como "no oigo, soy de palo, tengo orejas de pescado"); y por otra legitiman cualquier sanción frente a los "enemigos del pueblo". Quienes promueven la prostitución no sólo estarían perjudicando a la colectividad (se empalman con esta palabra), sino que además todo castigo que se les aplique estaría respaldado por la voluntad del pueblo (ooooh, sííí, me cooo....h) que es unánime, indiscutible, y la cual EL PARTIDO representa fielmente.
Ésa es la finalidad que tienen al definir la prostitución, no reflejar la realidad (que sería lo que pretende un objetivista como un servidor: esto es tal cual es y punto pelota) sino RESPALDAR SU PROYECTO POLÍTICO. Muchos pro-derechos y prostitutas tratan de sacarles de su "error", como se aprecia en las frases que he seleccionado para encabezar esta entrada: Grisélidis Réal (Q.E.P.D.) señalaba que eran los abolicionistas quienes las esclavizaban al no permitirlas integrarse en la sociedad, que la causa de su desprotección y vulnerabilidad no era en sí el ejercicio de la prostitución sino el status legal que promovían quienes decían querer ayudarlas (no sé cómo, si ni las escuchan ni las respetan). Yo digo que no se están equivocando en nada, que lo que quieren es excluir a estas personas y perjudicarlas en todo lo posible. ¿Y no lo logran? Las propias feministas -eso sí, del "sector crítico" (ese que es sistemáticamente silenciado porque todavía no se ha enterado de que va la peli)- reconocen que, EN LA PRÁCTICA, éste es el resultado.
Bajo el actual discurso progre las prostitutas ya no son unas "desviadas sociales" como se las considerado durante mucho tiempo (aunque he de hacer notar que la represiva Ley de Peligrosidad y Reinserción Social de 1970 -no derogada hasta 1995- estaba inspirada en el documento abolicionista por excelencia, el tratado de Lake Success) sino "víctimas", a quienes hay que proteger aún a costa de su voluntad (dicen que es irrelevante, por considerarla "viciada"). Para arrebatar la libertad y la autonomía de estas mujeres necesitan construir engaños tan grandes como el del cartelón de la imagen, según el cual estarían ejerciendo su trabajo forzosamente, bajo coacciones físicas directas. La barbaridad es que, tras "rescatarlas", como no se consideran "víctimas" necesitan hacerlas pasar por un proceso "reeducativo" que incluye la detención, el aislamiento durante meses, el lavado de cerebro, uso de fármacos y el empleo intensivo de la violencia (incluida la sexual). A nadie tiene más miedo una prostituta que a uno de sus "salvadores".
Una vez que ideológicamente han tomado posición fabrican una serie de datos y cifras con los que recubrir sus falacias con un aire de conocimiento y respetabilidad. Asociaciones que trabajan en la calle, como Hetaira (que es Comisiones Obreras), denuncian que "las cifras sobre trata no son reales" y los abolicionistas no pueden explicar ni de dónde sacan su famoso 95% de mujeres obligadas a prostituirse ni sus 300 mil esclavas sexuales en España. De hecho se ven obligadas a admitir, como han hecho Beatriz Sánchez o Rocío Nieto, que las prostitutas dicen siempre prostituirse "voluntariamente" si bien lo achacan al control que ejercen "las mafias" sobre ellas. En todo caso, la cuestión del porcentaje de mujeres que se prostituyen voluntariamente o son prostituidas a la fuerza es un punto que divide por completo al feminismo. Cada cual suele creer a "los suyos", sé que nada de lo que diga podrá convencer a quien afirme lo contrario. Pero me gustaría invitar a reflexionar acerca de la disparidad de las cifras, no tienen nada que ver las estimaciones de las abolicionistas con las nuestras. ¿A qué creen que se debe este sorprendente fenómeno? ¿Mienten ellos? ¿Mentimos nosotros? ¿Manejamos conceptos distintos?
Lo que sí son "reales", es decir, que provienen de un estudio, son los porcentajes de estrés postraumático y depresión: la conocida abolicionista norteamericana Melissa Farley realizó un trabajo en el que afirmaba que las consecuencias de ejercer la prostitución en la salud tanto física como psicológica eran devastadoras. Bien, lo hizo según sus parámetros. Por su parte la psicóloga española Mª Jesús Fernández Ollero hizo otro estudio del estrés en las prostitutas inmigrantes en Avilés, empleando un "grupo de control" de mujeres ocupadas en sector hostelero y no halló diferencias significativas entre ambos grupos (si bien las dolencias físicas se localizaban en zonas diferentes, relacionadas con la actividad que desempeñaban). Como con el caso anterior, cada "bando" emplea los datos e informes que le dan la razón.
Así pues, parece que las cosas no están tan claras. La manera en la que los abolicionistas conciben la prostitución es legítima, no me cabe la menor duda, pero ni los datos que manejan son incuestionables (a pesar de que traten de presentarlos así) ni está tan claro que sus medidas favorezcan a las prostitutas (de hecho, muchos opinamos que las perjudican gravemente). No porque discrepe de ellos voy a silenciarles, así que aquí les dejo con una buena ración de abolicionismo mainstream. Que no se les indigeste:
Verónica Gutiérrez realiza una entrevista a Santiago Pardilla Fernández sobre la prostitución en España y su posible legalización. Santiago es estudiante de 3º de Grado de Sociología de la Universidad de Alicante, ha sido miembro del Proyecto de Participación Ciudadana de la Generalitat Valenciana y gestiona el Blog: sociologosplebeyos.com, dedicado a la difusión de la sociología por Internet.
Pregunta: ¿De qué manera influye la sociología en el mundo de la prostitución?
La Sociología percibe la prostitución como una forma de convertir el cuerpo humano en un objeto material por un valor. Estudiamos la prostitución como un fenómeno social característico de las culturas machistas, criticamos la inactividad de parte de los dirigentes ante este hecho y destacamos los estereotipos presentes en el sexo.
Pregunta: ¿Cómo conceptualizas prostitución y trabajo sexual?
En primer lugar la prostitución, se define como la actividad a la que se dedica quien mantiene relaciones sexuales con otra persona, a cambio de una compensación económica u algún tipo de bien material o cultural. En esta actividad, las personas prefieren ser desapercibidas y en el anonimato dentro del entorno familiar. Normalmente realizadas por personas obligadas a la prostitución por las mafias o por falta de recursos económicos.
Por otro lado, un trabajador sexual es aquella persona que gana dinero mediante actividades de tipo sexual o relacionado con la industria del sexo como medio de vida. Hablamos de bailarines y bailarinas de striptease, tele-operadoras de líneas eróticos, chicas de webcams, actores y actrices porno. Esto puede ser permanente o de manera ocasional. Buscan siempre reconocer como trabajadores legales, que sus derechos sean reconocidos y respetados, contando con seguridad social, protección laboral, y no ser estigmatizados por la sociedad.
Pregunta: ¿Ir a los clubes alternes “ir de putas”, forma parte de un ritual vinculado a la diversión masculina?
Las sociedades occidentales históricamente han sido patriarcales, por la cultura y la religión predominante. Uno de los valores de esta doctrina, es la diferencia hacía el protagonista de una infidelidad en la pareja según el sexo. Los hombres solían ser perdonados con una multa económica, mientras que las mujeres eran condenadas a la cárcel, maltratadas e incluso asesinadas. Este machismo sigue presente, ha desaparecido la diferencia legal, pero los hombres tienen mayor libertad en las relaciones sexuales, y no sufren tanto castigo social y exclusión en comparación con el sexo femenino.
Según los abolicionistas, la prostitución vendría a ser una muestra inquívoca del machismo imperante en nuestras sociedades. Una imagen como ésta simbolizaría el sometimiento de la mujer (medio desnuda, con botas altas, convertida en "objeto sexual de consumo") al hombre, lo que denominan "el Patriarcado".
Pregunta: ¿Cuáles son las causas más comunes que llevan a una mujer a trabajar como prostituta? ¿Cuál crees que es el motivo principal por el cual las mafias impulsan la prostitución en nuestro país?
Casi el 87% de las prostitutas están ligadas a la trata de personas, es decir, a mafias que introducen mujeres provenientes de países de Europa del Este o el Tercer Mundo. Son traídas engañadas de forma ilegal, convertidas en esclavas sexuales.
Forzadas a mantener relaciones sexuales seguidamente y sin protección, para pagar una deuda cuantiosa y por temor a que dañen a sus familias. Estos delincuentes suelen publicar los servicios en la prensa escrita y folletos en la calle. Teniendo en su propiedad varias casas donde se practican estos actos sexuales. También, es la falta de recursos económicos por no encontrar trabajo. Una situación que ha aumentado en estos años, a causa de la crisis económica. Aun así, no sólo las mujeres sufren estas circunstancias, ya que el aumento de la prostitución masculina es evidente por falta de trabajo en los inmigrantes. La policía ha empezado a desarticular bandas que se dedicaban a traficar con jóvenes brasileños para explotarlos sexualmente en España. Un fenómeno que en nuestro país es desconocido, pero en otras culturas ocurre. En Zimbabwe hay mafias de mujeres que capturan hombres para extraer esperma, usado en rituales de brujería.
En otro lado, existen personas que declaran su propia voluntad por realizar este trabajo. Esta última década, se han creado varias organizaciones y asociaciones que defienden esta idea, manifestando su derecho individual y una reglamentación de su profesión. Una de las más importantes es CATS, Comité de Apoyo a las Trabajadoras del Sexo. Son casos que representan un porcentaje pequeño en esta actividad.
Pregunta: ¿Cómo es el perfil de un cliente?
No existe un cliente prefijado, son hombres de distintas edades, nacionalidades, clases sociales… nos encontramos solteros y viudos principalmente, sin descartar hombres casados con hijos.
Pregunta: ¿Es posible un mundo sin prostitución?
Es como conseguir el fin de las guerras, es muy difícil debido a que hay empresas y personas que consiguen grandes beneficios por la venta de armas, producción de tanques, subvenciones, etc. Esto es igual en la prostitución, las mafias consiguen mucho dinero. Por tanto, considero la disolución de la prostitución como muy poco probable. Salvo un fuerte movimiento de condena por parte de la población y una regulación penal agresiva contra las mafias.
Concuerdo con D. Santiago, las mafias obtienen ingentes cantidades de dinero de la prostitución por lo que hablar de su disolución/abolición resulta absurdo. Para acabar con estos delincuentes, al igual que con las guerras, haría falta un levantamiento social generalizado que no va a producirse. Asimismo también me muestro muy escéptico frente a su persecución institucional, ya que la clase política no va a legislar en contra de sus propios intereses. La opción que nos queda es pragmática y gradualista, ir obligándoles a que vayan abandonando progresivamente su status privilegiado so pena de padecer males mayores (así se fueron implantando muchas constituciones, aunque otras se originaron por procesos revolucionarios, u otras grandes conquistas como la abolición -esa sí- del servicio militar obligatorio). Ya que es imposible vivir, o al menos no concebimos un mundo, sin mafias tratemos de disminuir y fragmentar su poder al máximo.
Pregunta:¿En la prostitución hay diferencias de clases?
En efecto, hasta en la prostitución existe una estratificación social según el valor que tiene una persona. Esto es marcado por el lugar de las relaciones sexuales, la protección a las enfermedades sexuales, la higiene, la discreción, la nacionalidad, el nivel educativo y la edad, entre otras. Todas estas variables, establecen los problemas específicos de cada “clase”, pues no es lo mismo practicar la prostitución en la calle que en un burdel o la discreción que debe tener una prostituta de lujo.
Pregunta: ¿Cómo sugieres que debería abordarse actualmente la prostitución? ¿Qué opinas sobre la legalización, regulación u abolición de la misma?
Hay partidarios de la legalización de la prostitución tiene bastante respaldo entre muchos liberales de izquierdas, al hacer transparente una actividad opaca, con garantías sanitarias y de protección a las prostitutas, recaudando impuestos y cotizaciones a la Seguridad Social. Sin embargo, los aspectos negativos a estos puntos se miran en los datos de países que regularon la prostitución como en Suecia.
En Suecia se penalizo en 1999 al cliente de la prostitución, el número de prostitutas se redujo entre un 30% y un 50%, el de clientes entre un 75% y un 80% y los traficantes de esclavas sexuales introducían anualmente entre 400 y 600 víctimas, para aquellos ciudadanos que son capaces de arriesgarse a una pena por comprar sexo. Mientras que en los países vecinos, Finlandia o Dinamarca, con la mitad de la población, pero con leyes más permisivas hacia la prostitución, las mafias podrían estar infiltrando hasta 15.000 víctimas al año.
Con ello remarcó que el tipo de regulación influye en la demanda y la oferta. Así, si tres cuartas partes de la prostitución son por trata de blancas, la legalización trae consigo más esclavas sexuales como en Finlandia y Dinamarca. Estas mujeres corren un riesgo 40 veces mayor de ser asesinadas que el resto de la población femenina y el 68% de prostitutas sufren estrés postraumático.
Pregunta: ¿Qué opinas sobre el futuro de la prostitución en España?
Las consecuencias de la crisis económica es evidente en la cantidad de personas que han necesitado hacer esta actividad por supervivencia. Recalco, que no veo una legislación de la prostitución, prevaleciendo la posición de no tomar medidas claras por parte del Estado, dejando esa tarea a los municipios, creándose un vacío legal.
Entrevistadora: Verónica Gutiérrez es estudiante de periodismo de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Esta entrevista forma parte de un trabajo sobre la “Legalización de la prostitución”.
ACTUALIZACIÓN (a 16/02/13):
Me pide que comparta (o comprenda, más bien) su opinión, que es "la que dicen los autores de Sociología". Claro que la entiendo, pero es que no es la que comparten todos los sociólogos. Le he puesto el ejemplo de Ignasi Pons y Antón de la universidad de Barcelona, autor de la tesis doctoral "La cara oculta de la Luna. Condiciones de vida de las prostitutas en Asturias", y de Marta Casal Cacharrón de la universidad de la Coruña, una de las ponentes en las comparecencias en el Senado del 2003. Los sociólogos no tienen una postura unánime frente a la prostitución, y si eso es lo que le enseñan en la carrera pues mal hecho, le están manipulando (como a mí en su día).
Aprovecho para adjuntar una serie de enlaces a varias entradas en este blog dedicadas a abolicionistas, estas sí, declaradas. Entre otras, en este blog he reproducido entrevistas y textos de Ángeles Álvarez, Lidia Falcón, Yolanda Besteiro, Rocío Nieto, Lara Padilla o Maria Teresa López. No creo que se me pueda acusar de tratar de ocultar sus planteamientos:
· Entrevistas a Maria Teresa López, veamos la prostitución desde el abolicionismo
· Entrevista a Lara Padilla (contiene cara a cara con Cristina Garaizábal)
· Rocío Nieto habla en Madridiario sobre la prostitución
· Rocío Nieto, presidenta de APRAMP, asegura no conocer a ninguna mujer que ejerza la prostitución voluntariamente
9 comentarios:
Cliente X, en la próxima sección musical pon "Me gusta ser una zorra", de las Vulpes.
A propósito, anoche vi a Carmen de Mairena en la tele. Le preguntaron si no le había resultado degradante practicar la prostitución y dijo que no, que eso es algo que se hace "cuando te gustan mucho los hombres". ¡Que gran lección Carmen de Mairena para los abolicionistas!
Alabo la valentía de los clientes de esa señora, la verdad... Mira esta noticia sobre las veleidades abolicionistas de la pornografía en Islandia, Cliente,sin palabras:
http://www.abc.es/sociedad/20130214/abci-islandia-prohibir-pornografia-201302141638.html
Rijoso, ese tema punk que me propones es muy cañero pero en cuanto a letra la verdad es que no aporta nada...
La Mairena es un crack, la admiro por su ausencia absoluta de complejos. Imaginaos vosotros con su cuerpo, ¿tendríais esa desenvoltura y desparpajo? Esa señora (lo remarco, porque una transexual es una mujer aunque no biológica) tiene una cabeza verdaderamente brillante. Como el Torbe sabe aprovechar su imagen de freak.
Y lo del gobierno islandés pues para qué decir nada. Si llevamos a sus consecuencias lógicas los argumentos que plantea asturiano sobre lo que "puede resultar nocivo" es lo que deberíamos hacer. Que unos dirigistas iluminados nos digan lo que nos conviene, entreguemos nuestra libertad al Leviatán.
He de acabar remarcando que vinculan la pornografía a la violencia, al crimen, y con su prohibición dicen proteger a los más jóvenes. ¿Os suenan de algo estos argumentos?
Legalizada sería más fácil ejercer, además de que la policía no cometería tantísimos abusos, y aunque seguiría habiendo corrupción (hablo según el país), pues por lo menos tendrían un poco más de seguridad.
Sobre el estés pos traumático y la depresión, personalmente creo que mucho es consecuencia de todo el estigma que conlleva ser prostituta, que como mujer no te respetas o por default usas drogas o eres mala madre, o no eres digna para que te tomen en serio y un larguísimo etc.. Incluso yo he visto un fenómeno muy curioso socialmente no es mal visto un striper que cobre, en México es visto como un chingon, un campeón que hasta las mujeres le pagan, y a sus madres les da orgullo, pero en la mujer es al revés, de pinche puta no la bajan, obvio a la mujer le causa más estrés, sabe que no es aceptada, que la desprecian. Y termina siendo muy deprimente.
Cada mujer habla como le va en la feria, muchas lo llevan muy mal y se amargan, a otras les gusta su trabajo, y no lo dejan aunque les den otras opciones, yo no podía creer esto hasta que lo vi con mis propios ojos, hasta que ellas mismas me lo contaron, y también vi casos de chicas explotadas con muchos traumas, drogadictas etc. Pero en las mujeres que ejercían por que les gustaba (como ellas mismas decían) vi mucha seguridad, mucha fortaleza, inteligencia, incluso una de ellas supo cuando dejar de trabajar y dedicarse a otra cosa. El tema da para muchismo, un besito
Ayer estuve en un piso de chinas. ¡Qué maravilla! Qué sumisión, que reverencia, que masajitos, que felación, que chochetes, que sonrisas...
La carne oriental no la he catado mucho pero me voy a aficionar.
Un piso de chinas es la peor pesadilla de una abolicionista progre.
¡Cuanta razón tiene Patpong!
Que ejercen porque les gusta? súper realista, sí, sobre todo en Méjico, ahora la prostitución es vocacional. A ver si te crees que porque dices que eres prostituta nos vamos a tragar todo lo que cuentas.
· Lilith: tienes toda la razón, una legalización en el sentido que deseamos mejoraría la situación de las prostitutas. Entonces, si no se hace es precisamente por...
Y tb comparto tu opinión en lo que respecta a que los mayores traumas y sufrimientos no están causados por el hecho en sí de prostituirse sino por la minusvaloración social aparejada a esta actividad.
Hay muchas cosas de la prostitución, como de todo, que hasta que uno no las ve no se las puede creer. Así es.
· Rijoso: todo el mundo que conozco habla maravillas de las chinas, pero yo tb no he estado con ninguna. Habrá que ver...
Lo que me jode es que no hay chinas ni en calle ni en clubs, sólo pisos y sólo de chinas. Es como si no estuviesen muy integradas, ¿no?
· Roberto, puedes hacer dos cosas. Escuchar a las prostitutas o a tus prejuicios. La elección es tuya,
nice post...thanxss
putas leon
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